Pero también existe la posibilidad de obsequiar intenciones, talento, paz, sabiduría y tiempo. Estos regalos que no cuestan nada y que valen mucho también son una opción para Navidad.
Regalos de Navidad que no tiene precio
Algo hecho por ti
El DIY o Do It Yourself aún esté vigente. Es una práctica que nos acerca a la infancia, pero que también conecta con el talento y la creatividad. Regalar algo hecho con tus propias manos es una muestra de dedicación valiosa. Si además el regalo es práctico o decorativo, la persona obsequiada te tendrá siempre muy presente.
Un momento de escucha
Regalar
un momento para escuchar a esa persona especial no tiene precio. Si
distracciones, sin teléfonos de por medio, un rato mágico para estar disponible
para el otro, para compartir secretos e intimidad. Una conversación auténtica y
una taza de té.
Compartir talentos
Los talentos
también son un excelente regalo. Un masaje, una canción, un poema, un postre,
un dibujo… cualquier cosa que sepas hacer puedes regalarla a esos seres que
amas. Cocinar para una persona es uno de los actos de amor más nutritivos, por
ejemplo.
Regalar tiempo libre
Cuidar
el bebé de una amiga para que ella pueda ir al cine, hacer el mercado o lavar
la ropa de alguna hermana, pasear los perros de esa tía que quiere ir al salón
de belleza… Regalar tiempo libre es un presente que será muy valorado por quien
lo recibe.
Desayuno en la cama
Un bonito presente que no pasa de moda es llevar el desayuno a la cama. A papá o mamá, a la pareja, a los hermanos e incluso a los hijos, agasajar con un delicioso desayuno servido en la cama es otra demostración de afecto. Puedes acompañarlo con flores silvestres o algún otro elemento decorativo.