Si bien es cierto que durante el sexo se liberan endorfinas que quitan el insomnio, la jaqueca y el mal humor, también es verdad que en algunos casos, tener sexo provoca dolor de cabeza.
Pero ¿qué es la cefalea coital? Consiste en la aparición de un dolor de cabeza muy intenso, que puede ser previo o posterior al orgasmo, que comienza como pequeños latidos en la frente o sien y luego se extiende a todo el cráneo.
Otras personas lo describen como un latigazo en el cuello, la nuca y la parte posterior de la cabeza. Como un estallido que se extiende por todo el cráneo y se concentra luego en la sien.
Sea como sea, se trata de un dolor sorpresivo y abrupto que surge, en muchos casos simultáneo al orgasmo. Un breve instante en el coinciden el placer y el dolor más intensos.
Por qué duele la cabeza durante el orgasmo
Existen
varias hipótesis que explican el porqué de la cefalea coital. Algunos expertos
lo asocian con las preocupaciones cotidianas, el esfuerzo por mantener una
actividad sexual óptima o el cansancio físico.
Otros afirman
que puede ser consecuencia de los picos de adrenalina que se producen durante
el acto sexual, a la misma tensión muscular y al bombeo cardiaco intenso que
precede al orgasmo.
Este tipo de jaqueca afecta al uno por ciento de la población mundial y es más común en hombre que en las mujeres, aunque ellas no están exentas de padecerla.
La cefalea coital puede ser preorgásmica
u orgásmica. En la primera, el dolor aparece levemente y se incrementa de
manera gradual a medida que se alcanza el clímax. La orgásmica, en cambio, es
la más común y consiste en un dolor súbito e intenso que coincide con el
orgasmo o aparece inmediatamente después.
Qué hacer para evitar el sexo con dolor
Es habitual
que la cefalea coital se mantenga
entre 30 minutos y una hora, y luego el dolor desaparezca lentamente, sin que
se repita en ningún otro momento del día o actividad que se realice.
Sin embargo, la cefalea severa puede durar hasta 12 horas, con un dolor de cabeza leve que persistirá durante días. En cualquiera de los casos la primera recomendación es consultar al médico, para descartar alguna enfermedad subyacente.
En general el curso de la dolencia es muy variable. Algunos pacientes tienen un único episodio en toda su vida, mientras que otros padecen un episodio casi en cada relación sexual, a lo largo de varios años.
Lo más común es que los pacientes experimenten brotes de unas pocas semanas de duración en los que sufren episodios de cefalea en un gran porcentaje de ocasiones de actividad sexual y que posteriormente se detengan de forma espontánea.
Sin
embargo, existen maneras de tratar e incluso prevenir futuros eventos dolorosos
durante el coito, ya su médico le explicara cuales son los más apropiados para
su caso.
Lo importante es no permitir que esta afección arruine su vida sexual, por miedo a tener futuros encuentros sexuales para no padecer la fuerte migraña. Si solo es cefalea coital, siempre habrá una manera de tratarla.